Antes de hablar de los músculos es conveniente que empecemos por aprender que los músculos son los principales motores del movimiento, y que están formados por un haz de fibras que tienen una propiedad muy destacada: la contractibilidad. Gracias a esta facultad, el paquete de fibras musculares se contrae cuando recibe una orden adecuada, por ejemplo al contraerse se acorta y se tira del hueso o de la estructura y cuando termina este trabajo recupera su posición de reposo. Estas fibras se colocan en forma de haces dentro de unas vainas conjuntivas alargadas formando lo que conocemos como tendones que se unen a los huesos. Además de esta forma, las fibras generalmente se presentan en forma de huso, grueso en el centro y fino en los extremos.
Pero… ¿cuál es la misión esencial de los músculos? ¡Claro!, la misión más importante es mover las diversas partes del cuerpo apoyándose en los huesos; esto se logra gracias a que son blandos y se pueden deformar o contraer.
La forma de los músculos

Sabías que el cuerpo humano se cubre con unos 650 músculos de acción voluntaria y que esta riqueza muscular permite realizar miles de movimientos. Por ejemplo y de acuerdo al tipo de movimiento, hay músculos planos como el recto del abdomen, en forma de huso como el bíceps o muy cortos como los interóseos del metacarpo. Algunos músculos son muy grandes, como el dorsal en la espalda, mientras otros muy potentes como el cuadriceps en el muslo. Además, los músculos sirven como protección a los órganos internos, dan forma al organismo y expresividad al rostro.
Conoce los músculos principales que conforman el cuerpo humano en la siguiente figura:
