¿Qué es?
La lluvia ácida se detectó por primera vez en Inglaterra en 1872, donde era ocasionada por el uso de carbón y aceite como combustibles. El término se le debe a Angus Smith, quien estudió la contaminación industrial en ese país.
La acidez natural de la lluvia depende de la región y de la época en la que se mide. En promedio se estima que tiene un pH de alrededor de 5.6, es decir, ligeramente ácida, y se debe a la presencia de CO 2 en la atmósfera, que al reaccionar con el agua forma ácido carbónico. Si el pH es menor a 5.6 se considera ácida y es producto de la presencia de óxidos de nitrógeno y de azufre que reaccionan con el agua de la atmósfera produciendo ácido sulfúrico y nítrico.