Garantizar una vida sana y promover el bienestar de toda la población es fundamental para construir sociedades prósperas. De hecho, el acceso a la salud y bienestar es un derecho humano y no se logrará un progreso completo hasta que se alcance la cobertura sanitaria universal (garantizar que todos podemos recibir los servicios sanitarios que requerimos sin tener que pasar penurias económicas para pagarlos1). Avanzar en este propósito exige un compromiso firme y constante que a largo plazo, no solo reducirá los costos en sistemas de salud sino que salvará muchas vidas.
En México, como en muchos países del mundo, se continúa trabajando para lograr la cobertura sanitaria universal, aunque es un hecho que aún no se ha alcanzado. Seguramente tendrás anécdotas personales o de algún familiar o conocido tuyo que haya pasado dificultades para acceder a los servicios de salud en momentos de enfermedad, esto es un claro signo del trabajo que aún hace falta para asegurar la cobertura universal.
Por ello, la Organización de las Naciones Unidas, en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) número 3 plantea la necesidad de garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades.
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