Movimiento Hippie: contracultura y crisis social en los 60.

Desigualdad social, persecución macartista, corrientes racistas, la formación de guettos y el recuerdo de una segunda guerra devastadora, pero en tierras lejanas, marcaron a las nuevas generaciones que comenzaron a cuestionarse el aparente confort y las contradicciones de una sociedad consumista.

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B@UNAM

Movimiento Hippie: contracultura y crisis social en los 60.

Los sesenta, confort y contracultura

Tras el término de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos y otros países occidentales como Inglaterra y Francia, fueron escenario de un periodo de desarrollo sin precedente en términos económicos, tecnológicos, sociales y culturales. Esos años, denominados por el historiador Eric Hobsbawm como “los años dorados” establecieron y difundieron un modo idealizado de concebir y habitar el mundo, el llamado american way of life. Ese estilo de vida implicaba cierta paradoja, pues por un lado exaltaba el consumo de artículos (desde alimentos envasados hasta televisión), productos culturales (cine, música y programación televisiva) considerados emblemáticos de la modernidad, mientras que por otro lado promovía actitudes en torno a la político, la familia y la sexualidad encaminadas a la conservación de prácticas y creencias “tradicionales”, como la autoridad indiscutible de los padres sobre los hijos, de los maridos sobre las esposas, la supuesta esencia doméstica de las mujeres, y la mirada a los problemas sociales como una cuestión de voluntad individual . A su vez, el anticomunismo de esos años permeaba la interpretación que desde Occidente, principalmente desde Estados Unidos, se hacía de la situación mundial, subrayando el supuesto peligro que las ideas marxistas, o la infiltración de agentes soviéticos para subvertir el orden público, y acabar con valores preciados para la sociedad, como la familia, la religión y la propiedad privada. El discurso anticomunista favoreció el desarrollo de procedimientos de control y supervisión social, enfocados especialmente a la población joven, y fue utilizado por los Estados Unidos para justificar su intervención en conflictos bélicos como las guerras de Corea (1950-1953) y de Vietnam (1965 - 1975), argumentando que era su deber defender al “mundo libre”.

Ese contexto también estuvo marcado por un notorio crecimiento demográfico iniciado al término de la guerra mundial, lo que significó una numerosa población infantil y juvenil para inicios de la década de 1960, al grado que se les conoce como la generación de los “baby boomers”. Dentro de esa nutrida población de jóvenes, algunos comenzaron a expresar su inconformidad y frustraciones frente a las aspiraciones consumistas y conservadoras del american way of life. El movimiento hippie o contracultura hippie es una de las manifestaciones más emblemáticas de ese rechazo.

Una familia en la década de 1950. “John Farrows and his family”, International News Service (1950),

Fuente: insert_link Wikimedia commons.

La contracultura hippie

El término contracultura implica el desarrollo de un estilo de vida, valores y significados que confrontan y desafían aquellos promovidos por la cultura hegemónica o dominante (Hall, 1968, Ibañez, 2013). En ese sentido, los “hippies” constituyeron una contracultura ya que no sólo rechazaron las normas y aspiraciones de la modernidad occidental, el consumismo voraz exaltado por los medios masivos de comunicación, y las estrategias militaristas y anticomunistas de sus gobiernos. También desarrollaron un conjunto de ideas, significados, valores y prácticas centrados en la renuncia al individualismo y egocentrismo del consumo moderno, así como en la búsqueda de reconectar su experiencia y subjetividad con la naturaleza, la humanidad y la espiritualidad. La vida en comunas, el uso de alucinógenos para “abrir la conciencia”, la ruptura con los códigos sexuales y familiares prevalecientes, acciones ecologistas (vegetarianismo, granjas autosustentables) así como las manifestaciones pacifistas multitudinarias fueron algunas de sus prácticas más notorias.

Varios autores consideran el verano de 1967 como el momento fundacional de la contracultura hippie, debido a la visible concentración de grupos con estas características que tuvo lugar en San Francisco California. Sin embargo, la conformación de estos grupos derivó de varias influencias ideológicas, académicas, religiosas y estéticas provenientes de diversos puntos del orbe. A continuación, te mencionamos algunas:

  • Generación Beat y Beatniks

    Como expresión de rechazo a la vida moderna occidental, la contracultura hippie tuvo una fuerte influencia del movimiento Beat, o Generación Beat, unmovimiento literario que desde inicios de la década de 1950 expresó su desprecio por los valores estadounidenses en el renglón del consumo, la rigidez de las normas sexuales y relativas al uso de drogas en la época. Los autores más representativos de la generación Beat incluyen a Jack Kerouac, William Burroughs y Allen Ginsberg. Estos autores mostraron en sus poesías y novelas una profunda oposición a la idealización del consumo moderno, masificado a través de los medios de comunicación. Estadounidenses en su mayoría también repudiaban el discurso militarista que utilizaba su gobierno para justificar la guerra de Corea, y la cacería de comunistas. A su vez, los autores beat y sus seguidores, los beatniks, rechazaban el profundo racismo y la discriminación contra la población afrodescendiente en Estados Unidos, por lo que su acercamiento a los barrios negros y sus expresiones culturales y musicales, también sentó ciertas bases para el apoyo a los movimientos en pro de los derechos civiles de la década siguiente, e impulsó la influencia del jazz y el rythm and blues afroamericano. A su vez, algunos de los autores beat, como Jack Kerouac tuvieron una cercanía importante con las religiones orientales, principalmente el budismo y el hinduísmo, elementos que posteriormente estarían presentes también en la contracultura hippie.

    Los autores de la generación beat tambien influirían en varios de los poetas y músicos que fueron considerados icónicos para la contracultura hippie como el cantautor de folk rock BobDylan o el entonces aún beatle John Lennon, entre otros. Como la generación beat, los hippies sostenían una actitud antibelicista, así como un marcado rechazo por involucrarse en cuestiones políticas, lo que les generaría múltiples críticas por parte de otros grupos contraculturales radicalizados políticamente.


    Manifestación antibelicista contra la guerra de Vietnam en 1967. Crédito: Albert R. Simpson, Army audiovisual center (1967).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.

  • Timothy Leary y la mística de los alucinógenos

    Otra influencia importante en la contracultura hippie serían los experimentos impulsados por el psicólogo Timothy Leary consustancias alucinógenas, entre ellas los hongos y el ácido lisérgico o LSD, cuyo uso se había extendido desde la posguerra. Más allá del uso recreacional de estas sustancias, Leary sostenía que eran vehículos que permitían abrir las puertas de la percepción, lo que a su vez hacía posible que las personas modificaran su percepción del entorno y se conectaran con emociones y pensamientos inexplorados en sí mismos. Las experiencias alucinógenas que Leary promovía en sus estudios y con sus estudiantes, le llevaron a tener problemas con la ley y con la universidad. No obstante haber perdido su licencia profesional, Leary continuó su experimentación con psicotrópicos desde una perspectiva cuasi religiosa, fundando en 1966 la Liga para el Descubrimiento Espiritual, con la que promovía el consumo de LSD. Esta perspectiva espiritual y mística sobre el uso de drogas, le hizo popular entre los grupos contraculturales de jóvenes, quienes buscando experiencias alternas a la modernidad y consumismo occidental, encontraron en el uso de psicotrópicos una manera de desafiar ese plano de realidad. Leary además difundió lo que entonces se llamaba “dropping out”, o la renuncia a las aspiraciones y códigos morales, económicos y políticos de la época, para sustituirlos por la experiencia de unidad en lo sensorial, lo místico y lo espiritual. Evidentemente para alcanzar esa experiencia, las drogas resultaban un factor fundamental. La idea del “dropping out” lo cual influyó tanto en el surgimiento de sitios donde se daba vida comunitaria como en el relajamiento de las normas sexuales prevalecientes en la época, especialmente para el caso de las mujeres.


    John Lennon, Yoko Ono y Timothy Leary durante la grabación de “Give peace a chance” en 1969. Leary incluso es mencionado en la letra de la canción, junto con Allen Ginsberg, Bob Dylan, y otros. Crédito: Roy Kerwood (1969).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.

  • Influencia oriental e indoamericana

    Además del uso de drogas alucinógenas, la estética psicodélica fue uno de los resultados más evidentes de la búsqueda de experiencias pararomper las ataduras de la realidad moderna y sus idealizaciones. Este mismo afán hizo que muchos jóvenes se acercaran a prácticas religiosas orientales, como el budismo, el hinduismo e incluso la recuperación de símbolos, rituales y prácticas originarias de los indios americanos.


    Esta búsqueda e identificación con prácticas religiosas diferentes al cristianismo occidental, también tendría una huella indeleble en la indumentaria y las prácticas cotidianas de losgrupos hippies. En cuanto a la indumentaria fue común el uso del pelo largo tanto en hombres como en mujeres. También popularizaron las prendas de vestir con motivos o estampados orientales o de origen indoamericano, como zapatos de piel cosida, huaraches, bandas en la cabeza, faldas largas, entre otros. Más allá del atractivo estético de esta indumentaria (que eventualmente se convirtió en moda), los hippies elegían estas prendas para reflejar su interés e identificación con el simbolismo y los materiales usados tanto en oriente, como en las tribus americanas. El escritor mexicano José Agustín, refiere que a finales de la década de 1960 numerosos hippies estadounidenses y de otras nacionalidades llegaron a Huautla en Oaxaca en búsqueda de Maria Sabina, con el fin de que los guiara en la experiencia sagrada del consumo de hongos. Agustín relata que estos visitantes además solían comprar prendas de vestir y huaraches típicos de la región, lo que dio un impulso a estos productos y a su uso entre los jóvenes locales, tanto de la región como de las urbes mexicanas, a quienes el escritor denominó socarronamente “jipitecas”.

    México no fue el único sitio donde grupos de jóvenes adoptaron la estética y el estilo de vida hippie. Prácticamente todo Occidente recibió su influencia: Inglaterra, Francia, Alemania y en general los países europeos. Incluso también hubo grupos hippies en diversos puntos de la Unión Soviética, sobre todo en Moscú y las regiones bálticas.


    Jóvenes argentinos, cuya indumentaria muestra la influencia oriental, psicodélica y de otras culturas autóctonas, características de la contracultura hippie. Autor desconocido (1968).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.

Las influencias del beat, el orientalismo, el uso de alucinógenos y las estéticas no occidentales delinearon las prácticas que caracterizaron a la contracultura hippie. Algunasde esas prácticas ya fueron mencionadas: actitud y expresiones pacifistas, el rechazo a las instituciones y discursos políticos existentes entonces, el consumo de drogas alucinógenas, la búsqueda de respuestas espirituales y una estilo particular de indumentaria que conjugaba la influencia del orientalismo, con símbolos y prendas indoamericanas.

A continuación enumeramos algunas otras prácticas que también fueron parte importante de la contracultura hippie:

  • La vida en comunas

    En su búsqueda por subvertir los valores, costumbres y normas de la cultura dominante, específicamente la aglutinada en el american way of life, los jóveneshippies plantearon como única posibilidad el establecimiento de un nuevo modo de vida que permitiera dejar de lado el individualismo y la lógica económica del consumo capitalista. Lejos de buscar un movimiento revolucionario, como el que planteaba un sector de la izquierda neo-marxista en esos mismos años, los partícipes del movimiento hippie consideraron que la alternativa era la creación de comunidades en donde techo y comida fueran bien común, y las responsabilidades para el cuidado y mantenimiento también se compartieran en igualdad de condiciones. Estos sitios, conocidos como “comunas”, tuvieron en su mayoría un carácter rural, y se dedicaron a actividades agrícolas, como una manera de oponerse a la industrialización, y revalorar el estilo de vida de las comunidades menos modernizadas, y por ende consideradas en la mirada hippie como más auténticas. Ya para 1972, el sociólogo Keith Melville refería seis de las comunas más importantes en territorio estadounidense, que tenían en común un estilo de vida autosustentable, como era el caso de Morningstar East en Nuevo México, construida con ladrillos de adobe que eran fabricados por los mismos residentes, quienes además también compartían las actividades agrícolas necesarias para la alimentación de la comuna. Otra de las comunas más famosas en la época y que prevalece hasta la actualidad, fue la denominada “The Farm”, fundada en 1971 en Summertown Tennesse por el filósofo Stephen Gaskin. Gaskin había conducido con anterioridad las “Monday night class” y su versión itinerante “The caravan”, que consistían en experiencias colectivas de uso místico de alucinógenos. El objetivo de “The Farm” comuna que aún existe en la actualidad era crear una comunidad espiritual en donde hubiera un claro compromiso de cuidar los unos a los otros.


    Albert K. Bates, actual promotor de ecoaldeas, residente de “The Farm” desde 1972. Créditos: Russell Honicker (1981).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.

  • Actitud ecológica

    Todavía en la década de 1960, prevalecían discursos y actitudes que consideraban que la modernidad tecnológica alcanzada hasta entonces era muestra de lasupremacía de la humanidad por encima del resto de especies que habitan el planeta. Sin embargo, la influencia recibida por los jóvenes hippies tanto del pensamiento oriental, como de las creencias indoamericanas y prehispánicas que acompañaron el consumo de alucinógenos, visibilizaron una perspectiva que consideraba a la humanidad como una entidad que debía estar en equilibrio con su entorno. A ese pensamiento se sumó el rechazo de los grupos hippies por el consumo desmedido, prefiriendo el autoconsumo y la utilización de productos no sintéticos, así como la preocupación por los efectos que en el ambiente tenía la industrialización acelerada y las pruebas nucleares. Todos estos elementos dieron un notorio impulso a una actitud ecologista que incluso fue la base para el surgimiento de organizaciones como Green Peace.


    El “Rainbow warrior” es uno de los primeros barcos adquiridos por la asociación Green Peace, surgida en 1971. Crédito: Farid Mernissi (2016).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.

  • Itinerancia

    Otra de las prácticas recurrentes de los hippies de finales de la década de 1960 y la primera mitad de la siguiente fue su gusto por recorrer el mundo, especialmente aquellas regiones que más distaran del ideal occidental moderno y urbanizado. Esta práctica recibió en gran medida el impulso de la novela On the road de Jack Kerouac (Generación Beat), que narra el recorrido del autor por diferentes puntos de Latinoamerica. Además de los numerosos contingentes que llegaron a Huamantla, Oaxaca en búsqueda de la experiencia alucinógena y espiritual de los hongos, otros de los destinos más elegidos por grupos hippies se ubicaron en el Oriente Asiático: Estambul, Teherán, Kabul, Nueva Delhi, Dhaka, Bangkok. Más que viajes turísticos, donde los visitantes ven a los lugareños como exóticos, la itinerancia hippie buscaba entrar en contacto directo con la cultura y la espiritualidad local. Además para transportarse, estos viajeros usaban los medios más rústicos o menos turísticos posibles, preferían el barco a los aviones, solían trasladarse en viejas camionetas, o incluso en medios rudimentarios. Estos viajes resultaron tan emblemáticos de la itinerancia hippie, que incluso la ruta que unía estos destinos del oriente asiático fueron denominados como “Hippie trail”.


    La ruta del “hippie trail”. Crédito: NordNordWest (2013).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.


    “The Freak Street” en Kathmandu, uno de los hitos del Hippie trail. Crédito: Chris Shervey (2011).

    Fuente: insert_link Wikimedia commons.

Pese a la actitud pacifista y hasta cierto punto apolítica mostrada por la mayor parte de los grupos hippies, lo cierto es que su aparición y su presencia en diferentes espacios urbanos occidentales de finales de 1960 causó algo más que preocupación. Por su apariencia, así como por el consumo de drogas tuvieron múltiples problemas con la ley. Las autoridades de diversas ciudades solían arrestarlos por delitos como la vagancia, o en el más común de los casos, por el uso de sustancias prohibidas. También fue común que la contracultura hippie despertara una especie de pánico moral, especialmente entre los sectores conservadores de las sociedades occidentales. Las preocupaciones más recurrentes en ese sentido se articularon en torno a dos puntos. El primero tenía que ver con la amenaza que el “amor libre” y la vida en comunas representaba para los valores y costumbres sexuales y familiares de entonces. El segundo elemento de preocupación tenía que ver con la pérdida de la virilidad de los varones, que según sus críticos, quedaba evidenciada en el uso del cabello largo, la vestimenta colorida, y el desprecio por la violencia y la práctica militar.

Sin embargo, la mayoría de estos prejuicios replicaban las representaciones estereotipadas que la prensa hizo de la contracultura hippie en diversas partes del mundo.

A su vez, en el contexto en el que surgió la contracultura hippie, era común etiquetar como “hippie” a diferentes expresiones culturales y políticas que, aunque cercanas y contemporáneas tenían otras aristas. Estas otras expresiones contraculturales incluyen a los “yippies”, jóvenes mucho más comprometidos y radicalizados políticamente, que constituyeron el Partido de la Juventud en Estados Unidos, y solían estar presentes en manifestaciones en contra de la guerra y en favor de los movimientos por derechos civiles.

Yippies en manifestación en contra de la guerra, Chicago 1968. Crédito: David Wilson (1968).

Fuente: insert_link Wikimedia commons.

Cercanos a los yippies y sumamente críticos de los hippies estaban también los jóvenes de la “Nueva Izquierda”, quienes partiendo de bases marxistas planteaban como su objetivo la transformación política y económica de la sociedad. Finalmente, en un tenor de política de izquierda y cercanos a la itinerancia hippie estuvieron grupos numerosos de jóvenes cristianos (tanto católicos como protestantes) que impulsados la llamada “Teología de la Liberación” guiaron sus destinos al entonces denominado “Tercer mundo”. Estos jóvenes, a diferencia de los viajeros del “hippie trail” buscaban integrarse en comunidades marginadas pero no con fines místicos, sino para emprender labores de alfabetización, el establecimiento de comunidades autosustentables y políticamente conscientes, ya que muchos de estos jóvenes estuvieron fuertemente influidos por un marxismo que combinaban con su fe cristiana. Aunque su indumentaria pudo haber sido similar a la de los hippies, estos jóvenes no compartían con éstos ni el orientalismo ni el gusto por los alucinógenos.

Autoevaluación

Completa cada uno de los enunciados con la palabra o frase que corresponda.

Corea y VietnamcomunasTimothy LearycontraculturaHippie Trailamerican way of lifeNueva Izquierdaculturas indoamericanasactitud ecológicaanticomunismola generación Beat
  1. El _____________ era un estilo de vida consolidado en la segunda posguerra y difundido por todo Occidente. Destacaba la vida en la ciudad, el uso de tecnología en la vida cotidiana y celebraba la posibilidad de contar con una amplia gama de artículos para consumir.

  2. El _____________ era un discurso político que exaltaba la defensa del “mundo libre” frente a la supuesta influencia de ideologías que promovían el fin de la propiedad privada y el trastocamiento de los valores familiares.

  3. Estados Unidos justificó con el discurso anticomunista su participación en los conflictos bélicos de _____________.

  4. Debido a que los hippies promovieron significados, ideas, valores y prácticas opuestas a la ideología dominante, y exaltaban la renuncia al individualismo, al egocentrismo y al consumismo, pueden ser considerados una _____________.

  5. Uno de los antecedentes de la contracultura hippie es el rechazo al militarismo y la actitud apolítica promovida por _____________.

  6. _____________ fue un personaje que influyó la contracultura hippie debido a sus ideas sobre el potencial espiritual y místico de los alucinógenos.

  7. El uso del cabello largo, huaraches, joyería rústica y bolsas tejidas reflejaba el interés de los hippies por las _____________ .

  8. Las _____________ eran la propuesta hippie para dejar atrás el estilo de vida consumista de Occidente y establecer una relación de equilibrio con el entorno.

  9. Uno de los legados importantes de los hippies fue su interés por promover una actitud _____________ .

  10. Se le llamó _____________ a la ruta de destinos asiáticos que fueron recurrentemente visitados con el objeto de tener contacto místico y espiritualcon comunidades no occidentales.

  11. La _____________ está entre los movimientos contemporáneos a los hippies que tenían fuertes diferencias políticas e ideológicas con éstos.

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